Arroyo mío

arroyo
Compartir en

Arroyo, confidente mío tú has sido

Y a veces nada tuve que decirte

Y pídote perdón por maldecirte

Cuando en mis cuitas me acerqué abatido.

He oído el ruido de tus aguas, suave

Correr cual brisa de la primavera

Ha sido aquello, ¡y qué hermoso era!

Oír los coros de afinadas aves.

Ha sido aquello digo, tantas veces

Que en mi locura me hubo consolado

Dime, arroyo, ¿cuál funesto hado

Hace que ahora se mueran tus peces?

Contra las rocas daba tu corriente

Y allí bajaba al borde del suicidio

Cuando por necio, en yerro de un idilio

El desencanto me daba en la frente.

Allí —en ti arroyo—, y tu apacible hierba

Huía yo de la ignominia diaria

A tu lugar, pradera solitaria

Donde no se halla la tan vil caterva

Que te envenena, arroyo mío querido

Porque en tu cauce vierten el veneno

Para que su bolsillo esté más lleno

Y yo lo sé: de muerte te han herido.

Y tu agua, sepultada en mi memoria

Ya no corre, como antes le placía

Mas queda en mi recuerdo todavía

Porque allí pasó parte de mi historia.

Si te han matado a ti, arroyo mío

Matáronme también, no tengas dudas.

La vil canalla, aprendiz de Judas

Acabará con todo hasta el hastío.

Emanuel Bibini
Emanuel Bibini

Soy de Alberti, nacido —el 27 de enero de 1994—y criado, Provincia de Buenos Aires, Bachiller en Arte por la escuela Secundaria 3 "Movimiento arte concreto invención". Publiqué 5 libros: (Escritos de noche, reflexiones y poemas de un obsesivo), (Relatos Apocalípticos, 30 historias trágicas), (El hilo plateado de la muerte), (Tristísima comedia), y (21 de septiembre, el pueblo de los tiranos).

suscribite a nuestra
newsletter