Dic 2022
Arroyo, confidente mío tú has sido
Y a veces nada tuve que decirte
Y pídote perdón por maldecirte
Cuando en mis cuitas me acerqué abatido.
He oído el ruido de tus aguas, suave
Correr cual brisa de la primavera
Ha sido aquello, ¡y qué hermoso era!
Oír los coros de afinadas aves.
Ha sido aquello digo, tantas veces
Que en mi locura me hubo consolado
Dime, arroyo, ¿cuál funesto hado
Hace que ahora se mueran tus peces?
Contra las rocas daba tu corriente
Y allí bajaba al borde del suicidio
Cuando por necio, en yerro de un idilio
El desencanto me daba en la frente.
Allí —en ti arroyo—, y tu apacible hierba
Huía yo de la ignominia diaria
A tu lugar, pradera solitaria
Donde no se halla la tan vil caterva
Que te envenena, arroyo mío querido
Porque en tu cauce vierten el veneno
Para que su bolsillo esté más lleno
Y yo lo sé: de muerte te han herido.
Y tu agua, sepultada en mi memoria
Ya no corre, como antes le placía
Mas queda en mi recuerdo todavía
Porque allí pasó parte de mi historia.
Si te han matado a ti, arroyo mío
Matáronme también, no tengas dudas.
La vil canalla, aprendiz de Judas
Acabará con todo hasta el hastío.
Soy de Alberti, nacido —el 27 de enero de 1994—y criado, Provincia de Buenos Aires, Bachiller en Arte por la escuela Secundaria 3 "Movimiento arte concreto invención". Publiqué 5 libros: (Escritos de noche, reflexiones y poemas de un obsesivo), (Relatos Apocalípticos, 30 historias trágicas), (El hilo plateado de la muerte), (Tristísima comedia), y (21 de septiembre, el pueblo de los tiranos).