Las poesías de la magia
El frío cantar del bello olvidar
El otro día te miré y gocé del sol al caer.
Sos lo que sucedió y funcionó como medicación en medio del ciclón.
Amor es lo sintió mi corazón.
Un corazón roto sin razón.
El tiempo pasó y la tristeza se apoderó del corazón en tiempos de desolación. La razón habló de traiciones sin suficientes razones.
Mi mente cantó cuando el pájaro voló.
El olvido y desamor es lo que sufrió mi corazón en medio de un ciclón.
Flores lloran al recordar mi dolor.
Un corazón entre odio alienta al demonio.
Sueña sin adornos.
Los tiempos gritan y las lluvias iluminan mis últimas agonías.
Me despido cariño te olvido con un bello silbido y un último respiro.
Al adiós le tengo cariño y a ti un bello olvido.
Al final llevo recuerdos que bailan al recordar tus promesas.
Llora la agonía de frías subidas en medio de la monotonía.
Momentos grises que gritan frases de fieras raíces.
Dejé una sonrisa sin vida en medio de grandes subidas.
Sueños y vidas son las que están jodidas.
Espero tu sonrisa para si vengar la mía.
El jardín de los amantes
El otro día sembré flores mejores que tus errores dibujados en acciones.
Hablé con ellas.
Forman parte de miles de corazones aquellas que enriquecen las bellas centellas dentro de estrellas.
Miré el jardín de miles de colores.
Actores de mis noches llenas de reproches.
Picaflores jugadores visitaban el jardín en las tardes de colores.
Esperanzas de miles de corazones a ser grandes jugadores, soñaban ser mejores.
Pimpollos ganaban la carrera de miles de jugadores.
Insectos soñaban con los corazones de las abuelas admirando sus flores.
Rosas son las canciones que cantaban las ranas del jardín de los pequeños amores.
Armonía vivía la mujer que admiraba las flores de colores.
Sueños de colores.
Risas de flores habitaban mis viejos amores.
Él admiraba la mujer que añoraba ser joven, como sus pequeñas flores.
Jugadores de flores miraban las tardes de colores junto a las rosas canciones.
Poemas relataba la historia de mi amiga la que vivía en el estanque de agua brillante.
La joven hormiga habitaba el estanque que parecía un tanque ese admiraba el comandante.
Cada ser miraba constante el amante de la rosa y su padre vivía feliz junto a su madre admirando las begonias elegantes.
La joven que miraba sus vecinos añoraba cada tardes vivir un instante junto a las margaritas brillantes.
Todos los seres espeluznantes habitaban el jardín de los amantes.
Mi vida es igual a la de las personas que me rodean pero ¿Tenemos diferencias? sí... Diferentes mentes y formas de vida, pero nosotros creamos y partimos desde un mismo lugar "el nacimiento" después lo que hagamos a partir de allí es otro relato que escribirá el destino
