Estuve 3 meses con Denisse, ella estudiaba letras, trabajaba en un bar. Me dió una mano con la ortografía de los guiones. Siempre me decía -tus poemas son mejores que tus historias-. Nunca le pregunté con qué intención me lo decía, se ofreció ayudarme era lo que importaba. Disfrutabamos la compañía uno del otro, besos, birras, sexo, sudor; esos fluidos que cuando hay sentimientos de por medio nos parecen menos asquerosos. 

Les faltaban todavía, esos guiones estaban tan cocinados como los tostados que hace la idiota del café. Comenzó a decirme cómo podía seguir mi historia. La interrumpí diciendo que era mi historia, que en todo caso la escribiera ella, -Quedate tranqui, a mi tiempo, a mi forma- soltó las hojas. 

- Y escribí poemas entonces 

Ya había dejado esa mierda en Neuquén. Estaba cansado de escribir, metáforas y parafrasis - escribí relatos si sos el gran escritor-. Comenzamos a discutir. Siempre iban de lo mismo. No me gustaba Cortázar. Discusiones de ratones de biblioteca que antes se resolvían con sexo. Ahora duraban más, y se resolvían con mates o insultos. Ese día se enojó y se fue, -toma gran artista-Le regalé un guion de mierda. Un policial que no iba a ningún lado. No soy “el gran escritor” como ella dice. Denisse era mi reino y mi ruina por momentos. No éramos novios, no éramos nada. No éramos más que un imbécil que escribe y una estudiante, cuando eso me daba vueltas en la cabeza dejaba el mate y tomaba alcohol. 

Habíamos quedado en vernos. Llegó más tarde. Yo había salido antes como siempre. No llegaba, apenas la vi solo le grité, -con quien te fuiste?- me insultó y se fué. La seguí, mientras continuaba insultándola. Mierda, a la mirada los tres meses. A las semanas Marta me dijo que pasó una chica y dejó algo, me había devuelto el guion. Tomé una de las hojas, la di vuelta y comencé a escribir... traté de escribir un poema.

Pablo Antunao Oyarzo

Tengo 27 años. Actualmente estoy estudiando la carrera de medios audiovisuales. Escribo poemas, relatos y guiones. Me apasiona contar historias. Ya sea con las palabras como con las fotografías. Viví gran parte de mi vida en la Patagonia, en Junín de los Andes, Neuquén. Vivo en Buenos Aires hace tres años. Disfruto de la soledad, y la libertad de ser bastante nómade.