Estaba jodido. Solo y sin escribir, mis personajes no tenían color. Estaba  viviendo para la mierda, sin comer, solo mate y más mate. Las personas que  me hablaban eran extranjeros, con los que no quería tener un vínculo de  confianza. Necesitaba hablar con algún amigo. Me vi entre dos opciones. Volver como un perdedor a la casa de mis viejos o escapar de mi soledad un  rato; solo para respirar. Tenía personas cercanas pero tanto tiempo solo con mi  compañía, me fui apartando. En la pantalla de mi celular varios contactos, pero  me daba cosa molestar. Me acorde de una amiga; Mili. Le escribí, en más de  una ocasión fue un salvavidas, está vez podría ser una cuerda. Me respondió el  mensaje: "A las 17 en Havana, pero no me canceles de nuevo". Solté el mate,  ignore las voces de los extranjeros, me bañe y me vestí. Me sentía  emocionado, me cambie varias veces. Emprendí rumbo a la cafetería. Mili  siempre llegaba primero. Me recibió con una sonrisa y un abrazo, hace tiempo  que no nos veíamos me hizo sentir muy bien. -te pedí un café con tres media  lunas, ¿está bien? -. Se había tomado la molestia de pedir por mi. En realidad, siempre me pido un cortado, una salada y una dulce. le respondí -esta perfecto,  che tanto tiempo, ¿en qué andas? -. No había mucha gente en el café, Mili  miraba a su alrededor cuando estaba por decir algo de su vida, tenía como eso  de pueblo todavía. -estoy trabajando para el gobierno de la ciudad, ¿vos?-.  Llego la merienda, dos café y cuatro medialunas. -servite- le señale el plato con  medialunas. -¿no tenés hambre?-, Me moria de hambre. -si, pero come-.  Hicimos una pausa, cada uno probo su café, -me decías lo del gobierno de la  ciudad-. También miré alrededor. Suspiré como sobre exaltado. Le pareció extraña mi actitud, dejo su taza de café, -che estas bien?-. Me acomodé en la  silla, y tomé un sorbo de café. -Si, hace tiempo no veo a nadie, me siento un  poco solo, te vas a cagar de risa, pero me re preparé para verte-. ella abrió sus  ojos, y se hecho para atrás del asiento, como esperando el algo inesperado - Hec, todo bien pero nosotros…-, Me reí, -no boluda, déjame terminar, no es lo  que pensas-. Se acomodo en la silla, incomoda dijo - y ¿como sabes que  pienso? mientras aun echada hacia atrás bebía un sorbo de café -Pensaste  que me iba a declarar o alguna boludez así-. Mili con una risa nerviosa por la  situación - y si boludo, como vas a decir 'me prepare para verte'- Tenía razón,  hace cuanto no veía una persona, ni con el mate dialogo. Ambos nos reíamos. -

plata no tengo, más que esto no te puedo dar-. Ambos reímos, extrañaba su  risa explosiva. 

Terminamos cada uno su café, yo deje un pedacito de media luna. -como  andas con la piba esta… ¿cómo se llamaba? - Movió su mano haciendo una  mueca en el aire, no me acordaba. -¿Denise? la que estudia letras- Levanto  una ceja -¿letras? No, la otra nenita con la que te vi, la rubia que parecía una  muñequita, la que te regalo un celular- Bajo su cabeza ocultando la risa. -¿de  que te reis? Tarada - Negó con la cabeza. -A barbi no la vi más, y con Denise  estamos, ahí tirando. Vos, ¿estabas con? - Se acerco el mozo, Mili lo saco  volando con una mano como a una mosca. -Sigo con el mismo, bien, viviendo  en un depa. pero me preocupas, en serio, ya tenes 29 Hec. O sea, ¿en que  estas con esta piba?- Solté un suspiro, sabía lo que se venía. No quería un  discurso de la edad, el laburo y todo eso. - Nos peleamos, Nos peleamos,  porque yo estaba escribiendo un policial, ella me corregía la ortografía y  comenzó a cambiar cosas de los personajes de la trama, entonces le dije que  lo siga escribiendo ella- su rostro cambio por completo, -sos un pelotudo, y  ¿ahora no te hablas mas con la piba? - Estaba a pasos de ponerme sarcástico,  aunque ella tuviera razón, no era de lo que quería hablar. -Si, igual. hace  meses que no hablamos. Ya fue todo-. Se sentó derecha y me miro fijo a los ojos - ¿te hace bien? estar así, solo por quien escribe un guion-, Suspiré -No,  pero escúchame. Mas allá de Denise, porque ya se fue. Que le puedo ofrecer a  una piba. Voy a cumplir 30 el año que viene. No tengo un laburo fijo. No me  animo hacer algunas cosas, por cagón.- Se cruzó de brazos, en su cabeza  seguro mi argumento solo era una estúpida excusa. - Tu novio, por ejemplo,  tiene un laburo en blanco. La única mina que me banco fue Agus, pero fue la  única, después dudo que hallan mujeres que quieran bancar vagos, nadie  quiere maternar a un tipo, ¡dale! - Seguía teniendo la misma cara -mi novio  tiene trabajo en blanco, pero no podés ser tan boludito de compararte con otro.  Agus te banco porque te quería y tu problema es que buscas algo que sea  reciproco cien por cien. No siempre es así amigo. Porque es muy adolescente,  yo a él lo veo una vez por semana, a veces porque él labura y por mi trabajo  también, el amor es paciencia, constancia, dialogo y muchas cosas. Tu  concepto del amor y las relaciones se quedó en lo que tuviste en la 

adolescencia, no está mal. Pero ya tenes 29. Vos estas al pedo, pero mi novio  me está esperando mientras me tomo un café con vos, es joda- Me hizo sentir  mal -Bueno pero no si sabía eso, me hubieses dicho-. -No, me refiero que él  me hace el aguante, a eso voy. Pero es mi concepto del amor y las parejas Quizás fue su tono, pero tenía razón, ya era tiempo de crecer.  

-ta bien igual, si soy un vago, va aparecer alguien y me va a querer? solo me  dijiste vago que esta al pedo- Soltó otra carcajada, la miré, -no era joda boluda- . Tomo aire y se acomodo el pelo - ¿que queres que te diga Hec? Si alguien te  quiere te va a entender- Me eche hacia atras, medio cansado por su despliegue  de optimismo -Es que para vos es re fácil. Tenes pareja, amigas, un depa y eso  - Miro hacia todos lados, luego me miro a mi, levanto ambas cejas, no había muchas personas. Se acerco, Estiro su mano y la apoyo sobre la mesa -Si,  para mi es más fácil, solo me cagaron un par de veces, tipos inseguros como  vos. Me sumaron inseguridades, pero pude salir adelante. Vos podes boludo Tenía razón, no estaba tan mal. -Entonces que hago le escribo a Denise o que  hago? -, Me miró y me sonrió. - Tenes para dejar propina, pago yo, porque  como Agus te quiero, la próxima espero que tengas laburo y puedas por lo  menos invitarme un café- Saqué un billete de 200 y lo deje abajo del plato de  medialunas. Ella se levantó y fue a pagar. -Hec, hace lo contrario a lo que  haces siempre, suena trillado, pero al menos lo intentas. Te cansas de estar  solo, habla con alguien, o mejor busca laburo- se rio- Estaba de pie y yo seguía sentado parecía que me retaba. -Pero empezá a confiar en vos no le cagues  otras tipas la cabeza por ser inseguro, eso hace un imbécil, y no lo sos, bueno,  no tanto-.  

Me levanté me pusé el abrigo. ella me llevo hasta la residencia donde vivía.  Nos despedimos. Me quedé un rato en la puerta, no quería entrar, tenia ganas  de llorar. Saque el celular, seguro Denise estaba estudiando Mili ya se había ido para proponerle otro plan. No tenía ganas de estar con el mate ni con  gente. Así que me fui a caminar...  

Pablo Antunao Oyarzo

Tengo 27 años. Actualmente estoy estudiando la carrera de medios audiovisuales. Escribo poemas, relatos y guiones. Me apasiona contar historias. Ya sea con las palabras como con las fotografías. Viví gran parte de mi vida en la Patagonia, en Junín de los Andes, Neuquén. Vivo en Buenos Aires hace tres años. Disfruto de la soledad, y la libertad de ser bastante nómade.