Detrás de las imágenes que muestran los noticieros, hay otra ciudad; un lugar que se despierta al ritmo del running , de los caminantes o del ejercicio al aire libre. Sólo a nivel municipal hay más de 70 grupos de fitness registrados y más de 70 polideportivos en todos los distritos de la ciudad.

Cuando son las 7 am y en la Avenida Pellegrini se escuchan las pisadas de las zapatillas  más caras, uno sabe que se trata del ejército runner. Cada día de la semana y más aún los domingos, miles de personas salen a hacer ejercicio: correr, caminar, gimnasio o lo que tengan a mano . La idea es moverse.

Desde 2012 la municipalidad adoptó como política de estado, le pese a quien sea, la decisión de fomentar el movimiento entre los ciudadanos, no como una mera cuestión fitness ni de moda, sino que consiste en cortes de calles que se realiza a lo largo y a lo ancho del principal Boulevard de la ciudad, atravesándolo de sur a norte, para que cada domingo desde las 8 30 haya gente corriendo. La calle recreativa es una respuesta activa de la gente invitada a moverse. Bicicletear es la segunda opción; con bicisendas trazadas incluso en la actual gestión de Pablo Javkin, que promueven una movilidad sustentable , y que tiene en “Mi bici tu bici” el primer sistema automatizado de alquiler de bicicletas. Resulta una herramienta de lo más útil para cualquier tipo de traslado o incluso la recreación dominguera .

Pero claro: dos años de pandemia afectaron a todas las actividades relacionadas con el movimiento. Los entendidos  dicen que no hemos cambiado nuestra forma de movernos y de cuidarnos después del lock down. Sin embargo, todos resaltan que la constancia tiene frutos y de los buenos.

Jesús Delgado es responsable de Prominens,  un gimnasio atípico , con una concepción más cercana al bienestar que al mero fitness: “nosotros somos partidarios de hacer ejercicio combinado con aparatos, por supuesto tenemos en cuenta la alimentación y también la genética de cada paciente”.

Todos los profesores coinciden en que durante la pandemia muchas personas hicieron alguna actividad física en sus casas pero, por aburrimiento o falta de motivación, la terminaron abandonando. Esto trajo como consecuencia un menor rendimiento a todo nivel del deporte y del movimiento. También hacen hincapié en la asistencia del docente, sobre todo en cuanto a los tiempos y las frecuencias del ejercicio, incluso los momentos de descanso . El problema principal es desde la óptica de Delgado, la inconstancia .

Para Missael Bueno de 365, en plena zona de Pichincha: “ la gente tomó un poquito mas de conciencia después de la pandemia con respecto a su cuerpo , sin embargo apenas salimos de la pandemia la gente modificó sus hábitos, volvió a los gimnasios y a la actividad física  para después volverse a “ achanchar” sobre todo en los grupos de gente más grande.

Foto de Danielle Cerullo en Unsplash

Con respecto a los temporales que son lo que comienzan la actividad cuando arrancan los primeros calores, Delgado explica “ En tres meses no acondicionas tu cuerpo , por empezar la musculación comienza a actuar a las 72 hs de realizado el ejercicio, y en verdad es un combo que incluye genética, alimentación y ejercicio continuado pero también con descanso .”

Laureano Bordigotte profesor y coordinador de Rosario Fit comenta : “hay una cuestión estética muy fuerte en esta época que es ponerse la malla, es muy cierto que el factor estacional influye en la práctica del ejercicio más que la cuestión de salud “

Laureano coordina todas la mañana bien temprano en el Parque Independencia uno de los 70 grupos de fitness al aire libre: ”después de la pandemia vimos crecer nuestros grupos primero por una cuestión de protocolos , además hay una serie de requisitos que debemos cumplir como tener seguro y asistencia médica y estar coordinados por un docente , si bien el mal tiempo y no tener sanitario,  son una desventaja , mucha gente se volcó en especial al ejercicio al aire libre”

No hay magia en esto dice Laureano , hay que perseverar. Tanto en la práctica continuada y sostenida del ejercicio físico como en los cambios en la alimentación hacia opciones más saludables , se trata de ir haciendo pequeños progresos.

Con respecto a la alimentación consultamos a Irene Echeverría, nutricionista y a cargo de su propia dietética “ es cierto que mucha gente busca alimentarse mejor como también es cierto que hay gente que no le interesa en lo más mínimo , y quizás los deportistas sean los que mejor sostienen el hábito de la alimentación saludable , o incluso las personas con alguna patología que por orden médica tienen que modificar sus hábitos alimenticios. Pero también hay un grupo de gente que quiere alimentarse mejor y que por razones económicas no puede sostenerlo”

Además , explica la nutricionista, hay una realidad: alimentarse bien previene enfermedades y la población general lo va captando.

La magia no existe explica la nutricionista y muchas veces vemos en el consultorio como las modas del ayuno , o determinadas frutas y bayas para adelgazar parecen ser la respuesta al verano : cada cuerpo es único y entonces cada uno necesita una forma determinada de balancear los alimentos . 

¿Pero cómo hacer los cambios ? En primer lugar consumir la mayor cantidad de variedad de alimentos posibles es lo mejor. Darse un gusto está bien porque ayuda a frenar la ansiedad, el problema está en comer chatarra todo el tiempo, concluye .

Son casi las nueve de la noche cuando terminamos nuestra recorrida, y los últimos runners y caminantes  en el amplio boulevard van de regreso a casa.

Caen las luces y los vemos moverse en una ciudad donde se han dispuesto espacios de norte a sur y de este a oeste, moverse en grupos o solos, moverse en fin para vivir más y mejor.

Dreylla Moore

Soy licenciada en Comunicación Social, formada en el Periodismo, la literatura, los idiomas y las huertas, en una ciudad donde todos somos alguien que alguien más conoce. En mi casa no hay tele, pero si música. Y cuadernos . De todo eso digo que soy escritoriadora , me apasionan las historias y soy amiga de mirar donde otros no ven. Estoy escribiendo mi segunda novela que todavía no me he atrevido a publicar. A los 52 me doy el lujo de escribir para la vida como Dreylla Moore.